miércoles, 23 de mayo de 2018

Testimonio Monica Mariño de Forero


Fecha: 30/05/2012

Buenas tardes Doctor Jaramillo.

Para mi familia y para mi es un placer y un orgullo recibir esta carta y poder participar en esta gran iniciativa del canal RCN, simplemente porque  vivimos en carne propia los beneficios incalculables de la Dieta Jaramillo.
Mi hijo menor, Alejandro Forero, nació el 10 de Julio del año 2002 en la Florida, USA.

El embarazo no pudo llegar a término porque se me había acabado el líquido amniótico, razón por la cual los Doctores realizaron una cesárea antes de  llegar al octavo mes de embarazo. 

Sin embargo y, gracias a Dios, él nació bien, y no tuvo necesidad de estar en la sala de neonatos. Pero a los pocos días comencé a darme cuenta que el bebe lloraba incansablemente y se ponía muy inquieto cuando lo estaba alimentando con leche materna, todo el tiempo padecía de unos cólicos terribles, por lo cual no comía casi nada, tampoco dormía bien, puesto que el dolor y el hambre le despertaban continuamente.

Al poco tiempo la Pediatra me remitió donde el Gastroenterólogo, quien me comento que lo más probable era que el niño padeciera de intolerancia a la leche materna. Para este momento el ya contaba con mes y medio y empezamos a ensayar con todas las leches de formula existentes en el mercado, pero la situación en cambio de mejorar, empeoraba día a día, hasta el punto de que cada vez que intentábamos darle dos onzas de leche, que era lo máximo que recibía ya contando con cuatro meses de edad, tenia deposiciones diarreicas y estas últimas  venían acompañadas por sangre.  Nuestra angustia era terrible no sabíamos como podíamos ayudar a nuestro bebe y cada día lo veíamos más delgado, de mal color y padeciendo de unos dolores terribles.
Por ese entonces una de mis hermanas vivía en Cali, Colombia y una compañera de ella le contó de la Dieta Jaramillo. Mi hermana hizo la investigación y me consiguió el teléfono de la casa del Dr. Jaramillo. 
Primero que todo tengo, que dar fe de la amabilidad, prontitud y eficiencia, con que nos atendieron no solo el Dr. sino su esposa, quienes sin conocernos, nos escucharon y dieron consulta telefónica cada vez que fue necesario. Mi familia nunca olvidara el amor que sentimos de parte de ustedes en cada una de esas llamadas, y toda la caridad desinteresada que nos mostraron compartiendo con nosotros este maravilloso descubrimiento. 

La primera vez que hable con el Dr. y le expuse el caso, él con mucho cariño y paciencia se limito a explicarme de forma muy simple que si mi hijo no había tolerado la leche materna, no iba a tolerar ninguna otra leche, y me explico además, la cantidad de inconvenientes que tenia la leche de vaca. Poco a poco me fue enseñando como hacer la sopa y como dársela a mi hijo en un tetero. Mi esposo y yo preparamos la sopa y con mucha angustia e incertidumbre le dimos su primer tetero con cuatro onzas.  Para nosotros en ese momento ocurrió un milagro, Alejandro pudo terminar por primera vez de corrido un tetero sin parar, sin dolor y sin diarrea. Pero como si fuera poco pedía más, no lo podíamos creer.

Llamé nuevamente al Dr. y entre lágrimas le relate lo que había ocurrido, y él con una humildad natural se limito a decir que eso que yo llamaba milagro, era simplemente una sopa, que debía preparársela todos los días y que le diera toda la que el me pidiera. Desde ese momento,  Alejandro empezó a consumir más de 100 onzas diarias de sopa, nunca se ha enfermado ni siquiera de gripa, solamente una vez la ha dado una infección en la garganta cuando tenía 7 años. Además de ser un niño muy saludable, participa en un equipo competitivo de soccer, donde le va muy bien. Asiste a una escuela que desarrolla un programa bilingue de educación y habla, escribe y lee los dos idiomas con fluidez. Académicamente le va muy bien y es un niño tranquilo y feliz. 
En nuestro hogar todos tomamos esta  Dieta y nos ha beneficiado muchísimo.
Nuevamente gracias Dr. por toda su entrega y el maravilloso trabajo que ha venido realizando por tantos años. Que Dios Padre le continué colmando de bendiciones, de gracias y dones especiales, un abrazo fraterno y no olvide que en la Florida también cuenta con unos hijos suyos.

Adjunto dos fotos de mi hijo Alejandro Forero en la actualidad. 
Mónica Mariño de Forero.
TEL. (954) 349-6598
Sunrise, Florida, USA